lunes, 16 de noviembre de 2015

Vive.

Inspira.
Espira.
Respira.
Respira hondo.
Cálmate. Continúa. Atiende. Sonríe. Sígueme. Más lento. Más rápido. Muévete despacio. Corre. Cuida tus espaldas. No mires atrás. Sigue recto. Para. Descansa y párate. Repón fuerzas. Cáete. Levántate. Grita. Sé educado. Miente. Divierte. Sé serio. Sé sincero. Sé sincero contigo. Mira por ti. Tus amigos lo son todo. La familia es lo primero. No te fíes de nadie. Ama. Ama con locura. No pierdas la cabeza. Mantente cuerdo. Sé honesto. Aumenta tu autoestima, tu ego. Quiérete. Ámate. Déjate llevar. Vive sano. Emborráchate. Haz deporte. Céntrate en tus estudios. Estudia algo de provecho. Trabaja. Cotiza. Sé libre. Ve a donde quieras. Paga primero. Ten un hobby. Marca objetivos. Intenta cumplirlos sabiendo que fracasarás. Cuida la naturaleza. Consume. Sé humilde. Consigue mucho dinero. No dependas de nadie. Cásate. Ten hijos. Vuela. Manda todo a la mierda. Vive sin ataduras. Paga la luz, tu techo, tu existencia. Sé especial, como una persona normal. Cambia. No cambies nunca. Sigue consejos si quieres llegar a viejo. No aceptes que nadie te diga lo que tengas que hacer. Sigue las normas. Haz lo que creas. No decaigas. No te canses. Sigue. Sigue más rápido. Tómate tu tiempo. Vive tu vida. Hazme caso. Vive. Vive mucho. Pero vive tranquilo. Sobrevive. Sin prisas. Sin pausas. Sin descanso. 
Respira.
Respira hondo.
Inspira.
Espira.
Expira.


lunes, 27 de julio de 2015

Yo soy el tiempo

A veces de mis yemas salen llamas.
A veces de mi tristeza salen aguas.
A veces de mi cráneo salen chispas.
A veces de mi boca salen moscas.
Otras veces, cierro el puño, los párpados, 
mi mente y mi boca, pero no respiro.
No respiro mi ira, mis lágrimas, 
mis ideas y mis palabras. 
No respiro mi sentir, mi pesar, 
el peso de mis sentimientos, 
de mis pensamientos. 
A veces pienso que no siento y 
a veces siento que sólo pienso cuando siento.
Pero otras me callo en silencio y 
caigo al suelo, pero sin tocarlo, 
en un abismo de idas y venidas de la nada, 
en las andanzas vagas de ideas poco férreas 
aferradas a ellas mismas. 
Y cuando por fin quiera caer, 
será demasiado tarde, 
y el mundo que creo que creé, 
o que me creó 
o que creyó crearme
o que me creyó,
 cambiará por completo, 
irreconocible.
Despierto. 
Todo ha pasado en un instante fuera del tiempo. 
Fuera del tiempo que nos ata,
nos arrastra, nos empuja, nos succiona. 
Nos mata.
Entonces el tiempo existe y se transforma en mí, en mi puño, 
en mis párpados, en mi cráneo, en mí boca. 
Soy yo. Yo soy el tiempo. 
Te ato a mis ideas, te arrastro a mi abismo , 
te empujo a la nada, te succiono desde el suelo. 
Te mato, poco a poco, centímetro a centímetro, 
aplastando tu corazón contra tu alma 
o contra tu pecho 
o contra la nada, con mis muñones transparentes, efímeros;
soltando insultos de bar, de medianoche;
caricias de plenilunio, en el coche;
eclipses con ojos de terror,
y éste poema, sin dedos, mirando un reloj.


viernes, 9 de enero de 2015

Sólo escribo solo.

     Sólo escribo solo. Solamente por ahogarme al desahogarme. Sufro de inquietudes, de fobias que son miedos inquietantes. 
     Una vez más vine a exponerme, mientras me escondo entre las arrugas de las sábanas y las contradicciones que acarrea respirar y escribir. 
     Hoy el dolor de cabeza me ha acompañado durante todo el día, pero al acostarme no he pensado en calmarlo, sino en contarlo, aquí, a ti, a nadie. Soy esclavo porque uso mi libertad para hacer lo que hago, en vez de hacer otra cosa. Uso mi tiempo de vida para decir cosas inútiles, aquí, a ti, a nadie. 
     Porque nadie me lee, simplemente se lee, se entiende, se habla, se piensa, se reflexiona, se actúa, se olvida... y se muere. Se acaba. Porque aunque ésto se pierda en el tiempo y espacio, mientras lo lees, eres mío, eres un súbdito de un loco que en vez de afrontar su realidad se divierte mientras ingenuos como tú le buscan la lógica a lo que digo. No entiendas mal, me gusta la compañía... pero sólo escribo solo.


Bread 2